Un encuentro sobre antibióticos de la Cátedra MSD-UIMP recuerda que en Europa hay 400.000 infecciones de bacterias resistentes

Santander.- En la inauguración del encuentro Antibióticos y resistencias: un reto recurrente, organizado por la Cátedra MSD-UIMP de Salud, Crecimiento y Sostenibilidad, han participado Ángel Fernández, presidente y director general de MSD en España y Portugal, César Nombela, rector de la UIMP, y Bruno González-Zorn, doctor en Veterinaria del Centro de Vigilancia Sanitaria Veterinaria (Visavet).

En sus palabras, Angel Fernández ha justificado "la idea de poner en marcha este encuentro de antibióticos y resistencias porque en Europa se dan 400.000 infecciones de bacterias resistentes", lo que se ha convertido en "un problema de dimensión sanitaria y sociológica importante". Además, ha asegurado que aunque en España "la investigación es cada día más escasa en antibióticos y resistencias bacterianas", MSD es líder precisamente en esta área, y trabajan con el compromiso de investigar "vacunas, antibióticos y antivirales para ayudar a vivir más y mejor".

Por otro lado, César Nombela ha asegurado que "el encuentro es fruto del interés científico y sanitario que despierta la temática de los antibióticos", y además ha dicho que "si no hubiera antibióticos, no existiría información científica básica, y esto representa la revolución científica y sanitaria".

El rector, que ha participado en la primera sesión con una conferencia sobre la resistencia a antimicrobianos, ha explicado que "es evidente que hay que corregir el fenómeno extendido del uso masivo de inhibidores", y aunque se van a seguir suministrando antibióticos, "es importante plantearse qué medidas toma cada país". El rector ha recordado un artículo publicado por la revista Nature en el que se asegura que "es muy difícil tener una política común en prescripción, y el consumo varía mucho de un país a otro". A pesar de que podamos pensar que en España hay un uso indiscriminado de antibióticos, "estamos en mejor lugar que países como Irlanda o Francia", ha asegurado. Un menor consumo significa que se utilizan cuando es necesario, es decir, que se le da un uso adecuado a la administración del antibiótico.

Por otra parte, la industria farmacéutica se ve afectada porque la búsqueda de nuevos productos antibióticos ha descendido a niveles muy bajos, pese a que existen más posibilidades "desde el planteamiento de síntesis de nuevos fármacos a modificar algunos existentes".

Por último, el rector ha recordado que "la meta de la nanotecnología farmacéutica es el desarrollo de componentes que sean capaces de reconocer células cancerígenas", así como suministrar fármacos a un órgano o tejido específico. Y ha animado a los alumnos a meditar "dónde estaremos en unos años".

Fotografía de Juan Manuel Serrano