Santander, 8 de julio de 2022.- “No veo un escenario apocalíptico de conflicto social”, ha explicado Antón Costas, presidente del Consejo Económico y Social de España (CES), en declaraciones a los medios de comunicación tras ser preguntado durante la última jornada del XXVI Encuentro del CES por las movilizaciones con motivo de los salarios que apuntan los sindicatos en otoño por el crecimiento de la inflación.
El seminario, celebrado en el Palacio de la Magdalena y enmarcado en los Cursos de Verano 2022 de Santander de la Universidad Internacional Menéndez Pelayo (UIMP), ha abordado la situación económica de España así como los grandes retos actuales —la desigualdad, los refugiados y la energía—, y ha concluido con una reflexión sobre el valor del diálogo social a partir de la experiencia de los treinta años de vida del CES.
Durante la clausura de la cita académica, Costas ha pedido a Gobierno, patronal y sindicatos que acerquen posturas para implantar reglas justas de reparto de los impactos de la inflación, equilibrar los salarios con los márgenes empresariales, impulsar políticas sociales para proteger a los hogares y empresas más vulnerables, y cambiar el modelo de formación de precios de la electricidad.
Respecto a las pronunciadas subidas de precios de los últimos meses, Costas descarta un escenario de estanflación, teniendo en cuenta la actual tasa de crecimiento y la confianza de consumidores y empresas. Y ha explicado que la inflación europea viene por un shock de oferta, no de demanda, por lo que anima a combatirla de forma sofisticada.
Memoria Socioeconómica y Laboral 2021
A lo largo los tres días en los que se ha desarrollado esta cita académica, se ha presentado la Memoria Socioeconómica y Laboral del CES, correspondiente a 2021, que ofrece tres enseñanzas “fundamentales” para los próximos tres años a juicio del presidente de la institución: En primer lugar, los daños sociales y empresariales son menores, la recesión es más corta, y la recuperación es más rápida cuando existen reglas justas de reparto de los costes de una crisis; en segundo lugar, frente a una crisis con elevado grado de incertidumbre sobre el futuro, el mejor camino es el diálogo y la concertación; y por último, cuando las medidas de política social están bien diseñadas, aparece un círculo virtuoso entre el crecimiento económico y la sostenibilidad de algunas instituciones básicas de nuestra sociedad como la seguridad social.
¿Escenario de recesión?
Con respecto al actual debate sobre la posible llegada de una recesión, Costas ha señalado que no ve en el horizonte europeo una recesión al estilo de la de 2022 o 2018, al tiempo que ha manifestado la posibilidad de que países concretos como Alemania sufran una “recesión técnica”. No obstante, el economista cree que “hablar con un lenguaje apocalíptico no va bien”. “Tenemos delante una concatenación de calamidades inesperadas que producen un escenario complejo, doloroso, pero no apocalíptico, palabra que se ha utilizado y que no entiendo. No hay, a mi parecer, un escenario ni de gran recesión, ni mucho menos de inflación por delante. Lo que habrá es que gestionar bien un escenario donde las tasas de crecimiento sean un poco menores de las previstas antes de la pandemia y de la guerra de Ucrania, con un nivel de inflación un poco más alto”, ha añadido.
Sea como fuere, el Consejo lamenta que la situación social siga resintiéndose de la pandemia. Y es que, pese a las medidas impulsadas por las administraciones de apoyo a la economía y al empleo como los ERTE, un 20,9 % de hogares españoles estaría en situación de exclusión social en 2021, frente al 16% en 2018 según datos apuntados por el CES. En este sentido, la Memoria alerta del riesgo de pobreza energética, acrecentada en los hogares de menor renta, y agravado en el contexto de aumento de los precios de la energía.
No obstante, según Costas, lo que tenemos por delante es un “escenario manejable” que se manifiesta en que los precios de materias primas industriales fundamentales, como el aluminio, el cobre y el acero, están bajando en los últimos meses; o que los precios de materias primas energéticas como el petróleo estén ya bajando.
En este sentido, el catedrático en Política Económica ha incidido en que, en un escenario previsible, donde los precios de las materias primas básicas han comenzado a bajar al igual que la demanda, “no tiene sentido que el Banco Central Europeo suba de forma muy intensa los tipos de interés”.
Costas también ha defendido que actualmente no hay señales de expectativas de inflación permanente, y que, en el caso de España, los salarios no están dando signos de efectos de segunda ronda. “Sí debemos contener márgenes empresariales que están siendo superiores a los márgenes tradicionales de algunas empresas en los años previos a la crisis, pero no hay una expectativa de inflación recurrente en los próximos años”, ha indicado el presidente del CES.
Capacidad de diálogo social
Con respecto a las movilizaciones para aumentar los salarios con motivo del crecimiento de la inflación, Costas ha explicado la necesidad de tener “reglas justas” de reparto de los costes de las crisis actuales. Para ello, es importante según el economista, la capacidad de diálogo, y en este aspecto, “España tiene un patrimonio inmaterial que no sabemos poner en valor, y que es nuestra capacidad de diálogo social a lo largo de la democracia”.
“No hay ningún otro país europeo que tenga esta capacidad de patrimonio intangible. Esto va a ser importante para moderar este juego entre márgenes y salarios, pero tenemos capacidad para hacerlo. Estoy en contra de la retórica tremendista, fatalista, y mucho menos apocalíptica”, ha concluido.