Santander, 30 junio 2022.- “La inteligencia artificial marca un antes y un después en la detección temprana del cáncer de mama“. Este es una de las ideas que ha lanzado Armando Tejerina, presidente de la Fundación de Estudios Mastológicos (FEMA), en la rueda de prensa previa a la presentación del curso ‘Cáncer de mama: una enfermedad curable’, junto a Alejandro Tejerina, secretario del encuentro y director del Área de Diagnóstico por Imagen del Centro de Patología de la Mama - Fundación Tejerina, y Manuel Sánchez del Río, patrono de la Fundación de Estudios Mastológicos (FEMA).
En la primera jornada del encuentro que tiene lugar en el Palacio de la Magdalena, durante los Cursos de Verano 2022 de Santander, Sánchez del Río ha explicado que esta cita académica, que además se desarrolla durante el 90 aniversario de la Universidad Internacional Menéndez Pelayo (UIMP), “arranca en un marco incomparable del que FEMA forma parte desde el año 1997”.
El curso se centrará en ofrecer información sobre los últimos avances y los aspectos más relevantes en torno al diagnóstico y tratamiento médico y quirúrgico del cáncer de mama; poner de manifiesto la importancia de la medicina personalizada y de precisión aplicada al tratamiento; y dar visibilidad a los aspectos emocionales y sociales vinculados a esta enfermedad. Avances de relevancia puesto que, según ha explicado Armando Tejerina, se prevé la detección de unos 34.000 nuevos casos de cáncer de mama en 2023 en España.
Inteligencia artificial
La cita académica, en cuya realización participan profesionales de primer nivel de toda la geografía española, reunirá durante los dos días a numerosos asistentes entre los que se encuentran pacientes con cáncer de mama, familiares y cuidadores, asociaciones de pacientes, profesionales sanitarios de la medicina y la enfermería, así como a técnicos y psicólogos. Uno de los objetivos es que conozcan de primera mano cómo la inteligencia artificial está revolucionando el sector sanitario.
“La evolución tecnológica es imparable y ya contamos con potentes sistemas de inteligencia artificial que permiten establecer ayudas en el diagnóstico mamario al asistir en los algoritmos de decisión, realizando una detección más precisa y evitando errores”, ha añadido Armando Tejerina.
En el caso de la mama, un nuevo tipo de software realiza una lectura de las imágenes diagnósticas de la mamografía de la paciente y establece la probabilidad de que presente un tumor. Además, en el caso de detectar una lesión, el sistema señala la posibilidad de que sea maligna.
Diagnóstico a medida
Alejandro Tejerina ha explicado que “a pesar de la buena potencia diagnóstica de la mamografía, en ocasiones son necesarias otras pruebas como la mamografía con contraste y la resonancia magnética de mama que mejoran los resultados manteniendo la esencia de ese diagnóstico a medida”.
El secretario del encuentro ha agregado que el diagnóstico a medida “consiste en elaborar, de forma personalizada para cada paciente, qué pruebas diagnósticas se le realizará en base a sus características individuales: densidad mamaria, antecedentes familiares y antecedentes personales”. Es decir, estas se adaptan a cada persona de forma individualizada en función del riesgo que presente de desarrollar cáncer, favoreciendo así en mayor medida el diagnóstico temprano.
Tratamientos innovadores
Sánchez del Río ha agregado que, durante este encuentro, también se discutirá sobre los últimos avances en el tratamiento individualizado de la mujer con esta enfermedad —tanto en su opción quirúrgica desde la cirugía mínimamente agresiva hasta la mastectomía con reconstrucción inmediata—, así como los tratamientos quimioterápicos e inmunoterápicos elegidos en función de las características de la biología tumoral.
También se ha discutido sobre la radioterapia, “que ha experimentado un gran cambio en su técnica, pudiendo en muchos tratamientos conservadores recibir la mujer una radioterapia intraoperatoria que la permitirá finalizar su tratamiento en muy poco tiempo”, ha puntualizado el patrono de la fundación.
A pesar de que la radioterapia intraoperatoria no sea un tratamiento apto para todos los casos y llevará tiempo adaptarlo a los hospitales españoles, Armando Tejerina ha asegurado que en aquellos centros donde se pueda llevar a cabo, “la demanda de trabajo disminuirá puesto que el número de sesiones se reduce considerablemente”.
El director del curso ha lanzado un último mensaje sobre los índices de supervivencia en España, que comparados con los de otros países muy desarrollados es superior, y ha concluido manifestando que “en España, podemos presumir de que el tratamiento del cáncer de mama en es un modelo a seguir”.
