Directivos de la salud posicionan a los real world data como herramienta clave de la gestión sanitaria

Santander.- El encuentro Innovación, Real World Data (RWD) y participación del paciente, organizado por la UIMP con la colaboración de UCB, ha sido inaugurado en la Universidad Internacional Menéndez Pelayo (UIMP) con el objetivo de abordar los RWD y Big Data como herramientas para reaccionar a los retos en sanidad, propiciando una evolución a nuevos modelos de relación entre los gestores sanitarios y la industria farmacéutica.


El actual binomio entre las políticas de austeridad y la continua evolución de las innovaciones terapéuticas está provocando una necesidad de información real y actualizada del entorno sanitario que propicie la toma de decisiones en la gestión sanitaria. Ante esta situación, los responsables sanitarios demandan evidencias más sofisticadas e iniciativas que demuestren el ‘valor más allá del medicamento’, escenario en el que los Real World Data y el Big Data se posicionan como herramientas clave.


Miguel Ángel Calleja, presidente de la Sociedad Española de Farmacia Hospitalaria (SEFH) y uno de los directores del seminario, ha manifestado que “el sistema sanitario tiene que innovar en la forma de organizar la información especialmente en el ámbito del medicamento con el objetivo de pagar por el valor real que aportan a los pacientes y no solo por los resultados de los ensayos clínicos”. Esto supone que “cuando hablamos de valor real no significa el precio del envase del medicamento sino que debemos medirlo en tres aspectos: clínicos, es decir las mejoras en la salud; humanísticos relacionados con la satisfacción del paciente; y económicos para que la innovación sea sostenible”.


Por otro lado Calleja ha subrayado que en el seminario se están compartiendo experiencias reales de pacientes con patologías reumáticas que han estado en programas de soporte, abiertos a todos los hospitales, “lo que les ha permitido que las primeras administraciones, que son con las que más dificultades tienen, tengan una atención domiciliaria que les facilite el tratamiento y la adherencia, y eso es también parte de la innovación del sistema”, así como experiencias de resultados en vida real que han permitido adecuar el precio del medicamento al valor que generan en el paciente.


Gestión sanitaria


Para Joaquín Estévez, presidente de la Sociedad Española de Directivos de la Salud (SEDISA) y codirector del seminario: “Las aportaciones del Real World Data y del Big Data conllevan retos muy importantes desde el punto de vista de la gestión sanitaria”. Algunos de ellos son: la conversión de los datos y la información en conocimiento, la ciberseguridad en el entorno hospitalario, la utilización de sistemas informativos compatibles, las transparencia, la evaluación y la visión estratégica de su utilización.


Estévez añade que “existen numerosos proyectos piloto en muchas comunidades autónomas y hospitales para atender al paciente hospitalario externo, si bien se debe dar el salto a la implementación global y estratégica”. A su juicio, esto solo es posible adoptando el concepto de “innovación de forma transversal”, mediante la evaluación de los proyectos que se realicen y, en base a resultados de calidad y eficiencia, “decidir en qué se invierte y en qué no”.


Integración del paciente


Los dos directores del curso no han dudado en señalar la utilidad de conocer los datos de efectividad de las innovaciones terapéuticas sobre la población real, pero es importante incluir al paciente en el proceso con el fin de definir cuál es ese máximo beneficio desde su perspectiva. En esta línea, Jesús Sobrino, director general de UCB Iberia, ha destacado que “estas herramientas [RWD y Big Data] van a permitir hablar un lenguaje común entre administración e industria, sobre el cual podemos parametrizar la innovación farmacéutica a lo largo de su ciclo de vida y plantear nuevos modelos de relación comercial que integre al máximo las necesidades reales del paciente”.


Según ha explicado Sobrino en su ponencia, tanto en España como en el entorno europeo, se han integrado en la gestión hospitalaria los modelos de acuerdos de riesgo compartido (ACR) en los que, el laboratorio UCB ha sido pionero en su implantación en nuestro país. Hasta la fecha, UCB ha firmado 68 acuerdos de riesgo compartido en 10 comunidades autónomas. En el caso de ACR con foco clínico en artritis reumatoide, se está realizando un estudio en el que los resultados preliminares indican ahorros para el sistema nacional de salud de alrededor 1,050 euros por paciente tratado frente a un paciente no incluido en ARC.


Durante el acto inaugural, el rector de la UIMP, César Nombela ha subrayado que este encuentro “ha de servir para profundizar en aspectos fundamentales para una adecuada atención sanitaria al paciente, a la altura que demandan los momentos actuales”. Un desafío que ha considerado notable ya que “la asistencia sanitaria que demanda la sociedad, gracias al progreso biomédico, cada vez es más exigente en cuanto a calidad y desarrollo rápido y eficaz de los nuevos tratamientos”.

Fotografía: UIMP 2017 | Juan Manuel Serrano