El secretario general de la OEI aborda en la UIMP las actuaciones de internacionalización en Iberoamérica

Santander.- Durante su última jornada en la Universidad Internacional Menéndez Pelayo (UIMP), el encuentro Internacionalización para la Excelencia - Evaluación Intermedia de la Estrategia de las Universidades Españolas 2015-2020 ha propuesto una mesa redonda para abordar las Actuaciones de internacionalización en Iberoamérica: el papel de los Organismos multilaterales.

El director de Relaciones con Iberoamérica de la Universidad de Alcalá (UAH), Mario Martín; el secretario general de la Organización de Estados Iberoamericanos para la Educación, la Ciencia y la Cultura (OEI), Mariano Jabonero; el vicerrector de Internacionalización en la Universidad Pública de Navarra (UPNA), vocal del comité ejecutivo de la Conferencia de Rectores de las Universidades Españolas (CRUE)–Internacionalización y Cooperación y moderador de la mesa, Hugo López, y el investigador científico del Instituto de Historia (CSIC)/SEPIE, Manuel Lucena, han intervenido en una sesión, en palabras del moderador, fruto del “interés desde Latinoamérica en la enseñanza superior española que supone el planteamiento de un plan estratégico para el espacio iberoamericano”.


López ha subrayado que “la estrategia de internacionalización de las universidades españolas requiere un espacio autónomo del ámbito iberoamericano”, puesto que, “de manera objetiva”, la relación con Iberoamérica es “fundamental”. Y por ello, la aportación del Ministerio con un millón de euros a las universidades para el espacio latinoamericano si bien es de “agradecer”, no es “insuficiente”, ha manifestado.

Por su parte, el recién nombrado secretario general de la OEI ha incidido en el papel de este organismo multilateral e internacional de carácter gubernamental en la cooperación entre los países iberoamericanos en el campo de la educación, la ciencia, la tecnología y la cultura. En concreto, ha señalado su capacidad operacional, con “18 sedes en América y unos 500 funcionarios expertos en el ámbito de la cooperación”, y ha destacado el Centro de Altos Estudios Universitarios (CAEU) como impulso para estrategias de cooperación técnica en el ámbito de la educación superior, la formación de recursos humanos y la difusión del pensamiento educativo.

Respecto a la educación superior, ha destacado el programa Paulo Freire de Movilidad Académica, que ha arrancado con “una dificultad: la escasez de presupuesto”. Durante su candidatura a la secretaría general de la OEI, Jabonero planteó la implementación de “un Paulo Freire plus: una ampliación del programa” fruto de la preocupación de la OEI, como “política pública”, por el tema de la educación superior. Esto se debe a que en América Latina hay unas 10.000 universidades –sin contar algunas instituciones de educación superior (IES) - que acogen a “20 millones de estudiantes universitarios con un perfil sociológico parecido al que hubo en España en los años 60”, en referencia a los estudiantes universitarios pioneros en su estirpe, ha revelado.

En este contexto conviven “un crecimiento expansivo tremendo de las universidades privadas”, una desregulada oferta universitaria y un aumento de las tasas de la universidad pública. “Un momento crítico” en el que son necesarios “procesos de armonización y convergencia porque hay un problema de reconocimiento y acreditación de títulos”. Una línea de trabajo en pos de “una métrica común entre los países iberoamericanos” que depende de la adherencia de las universidades de forma voluntaria, ha explicado Jabonero.

Desde el punto de vista del representante de la UAH, una de las pioneras en internacionalización, el reto es ofrecer “programas de calidad acreditados”. En un contexto sociopolítico y económico complejo y cambiante, España debe “huir de modelos expansivos como los programas online” e implementar modelos presenciales “más controlados y acordes con las características de las universidades”, así como programas “coherentes con nuestra cultura e identidad”, ha insistido.

Por último, Lucena ha compartido algunos planteamientos sobre las actuaciones de internacionalización en Iberoamérica que deberían “satisfacer las demandas educativas emergentes” y promover la triple estructura para la innovación: “Educación, investigación y transferencia”.

 

Fotografías: UIMP 2018 | Juan Manuel Serrano