Santander, 26 de junio de 2024-. El Centro de Documentación de la Imagen de Santander (CDIS) ha presentado hoy la exposición ‘La alegría de vivir’, que muestra una colección de 43 fotografías del autor maliense Malick Sidibé, uno de los más destacados del arte africano contemporáneo. Esta exposición se enmarca en la programación cultural de la Universidad Internacional Menéndez Pelayo (UIMP) y cuenta con la colaboración del Ayuntamiento de Santander y el CDIS. La muestra permanecerá abierta al público hasta el 31 de agosto.
La vicerrectora de Relaciones Institucionales y Programación de Actividades de la UIMP, Matilde Carlón, ha asistido a la presentación, junto a Noemí Méndez, concejala de Cultura del Ayuntamiento de Santander y acompañadas por la comisaría de la exposición, María Millán y la coordinadora del CDIS, Manuela Alonso.
“Hay que ver la fotografía como una forma de arte extraordinaria” ha destacado Carlón, quien ha manifestado su satisfacción por la continua colaboración de la UIMP con el Ayuntamiento de Santander. La vicerrectora ha hablado acerca de las iniciativas como esta exposición y otras actividades que la UIMP comparte con el Ayuntamiento son “un reflejo de compromiso con la cultura y la comunidad.”
Por su parte, María Millán ha afirmado que Sidibé “empoderó a la juventud con sus fotografías”, y ha destacado su faceta como retratista de la juventud maliense de los años 60 y 70, apetente por divertirse en fiestas y bailes populares en una época que precedería a la independencia del país africano. Ganador de prestigiosos premios y considerado como un reputado artista a nivel mundial, Sidibé falleció en 2016, dejando como legado una obra que fue testigo del resurgir de una nueva era. “Perpetuando con su trabajo la importancia que tuvo la música, la danza y la moda como herramienta de protesta,” ha añadido Millán.
La muestra presenta una selección de fotografías que capturan la vibrante vida nocturna en salones de baile y clubes, además de íntimos retratos tomados en el estudio de Sidibé. Estas imágenes originales, impregnadas de autenticidad, reflejan la esencia de una época en la que la música era un componente esencial para la creación de cada escena. "Hacía que la gente fuera quien deseaba ser con sus fotografías de estudio", ha apostillado la comisaria.