Santander, 10 de septiembre de 2019.- La responsable de Relaciones Externas en Médicos Sin Fronteras (MSF), Raquel González, ha criticado, en una entrevista concedida a la Universidad Internacional Menéndez Pelayo (UIMP), que “se politiza la desgracia de los colectivos que vienen de fuera y se utiliza muchas veces como arma arrojadiza”.
González, quien protagonizó en la tarde del lunes, 9 de septiembre, la última conferencia del ciclo ‘En contexto’, se ha mostrado en contra del “efecto colateral” de “criminalizar a todos [los inmigrantes] y dar por bueno que toda esa gente que viene son criminales, terroristas, malechores y etcétera”. “Pensamos que son más tendencias políticas”, ha enfatizado la ponente, y ha añadido que esta predisposición “no se justifica en datos y en estadísticas”.
Respecto a “todo este discurso de odio, de xenofobia al que es diferente, al que viene de otros países, que viene huyendo de conflictos, huyendo de situaciones durísima”, González ha asegurado que la postura de la oenegé es “de franca oposición”.
Para González, esa “criminalización de las poblaciones”, por el hecho de estar “bajo el paraguas de determinados grupos denominados terroristas”, es una de las “limitaciones” con las que se encuentran actualmente a la hora de realizar su labor.
En referencia al trabajo de la organización, la responsable de las Relaciones Externas de MSF ha manifestado que la organización “se fundó por un número de médicos, pero también de periodistas”, siendo uno de los objetivos “alzar la voz”. Ante esto, según ha afirmado la ponente, a pesar de que no trabajen “en las causas de las problemáticas”, su trabajo se encarga de palear las consecuencias.
“No atacamos las causas de los problemas, no atacamos la pobreza estructural, o economías deficientes, o no mejoramos los sistemas políticos para que sean más democráticos”, ha apuntado González, quien adjudica este trabajo a “los que tienen una responsabilidad política”.
“Lo que tratamos de hacer es aliviar el sufrimiento humano de esas personas que, hasta que esa situación se estabilice, estarán en un momento muy difícil de sus vidas, para que luego puedan reemprender su camino; echarles una mano en ese momento tan crítico, para que luego ellos puedan decidir que quieren hacer con su vida y como la quieren manejar”, ha añadido la experta.
Actualmente, según ha detallado González, existen 30 conflictos en el mundo, donde MSF trabaja “más profundamente” ya que “es donde hay un mayor grado de vulnerabilidad”. “Cuando se habla de los conflictos, en ocasiones se habla desde un punto de vista geopolítico o geoestratégico, pero no poniendo el foco en la situación humanitaria”, ha expresado Raquel González, que, además, ha argumentado que ante esto “cada uno tiene la potestad de intentar informarse”.
Por otro lado, la ponente ha explicado que los cooperantes que se encuentran en las zonas de conflictos, cuentan con un teléfono de 24 horas de atención psicosocial o bien, en ocasiones, dentro del equipo hay un psicólogo, que, aunque es “para tratar a la población, también a veces actúan con los compañeros”. De esta manera, tienen asistencia si necesitan “colocar determinadas circunstancias”. “Al final, si no cuidamos a esos que están cuidando a los que están más vulnerables, no se puede llegar a un buen cuidado”, ha indicado González.
Foto: Esteban Cobo (UIMP)